El paro aumenta, los salarios pierden poder adquisitivo, las pensiones y la retribución de los empleados públicos continúan congeladas, se incrementa el copago en sanidad, las becas se reducen, se dobla la cantidad de alumnos por aula, el número de médicos disminuye y aumentan las listas de espera. Es evidente, tal como afirma el Gobierno, ha comenzado la recuperación. Será la de los beneficios empresariales y la de la cotización bursátil.